TRIUNFAR O FRACASAR

De pequeña veía como en un puesto de trabajo se aguantaba toda la vida, ahora si no eres funcionario la movilidad laboral es normal. Así que a muchos se nos plantea las tres posibilidades: ¿busco un trabajo con horario y sueldo fijo, estudio una oposición para estar tranquilo y seguro, o me lanzo e intento esa idea que llevo años pensando?

Yo he trabajado en casi todo, nunca me gustó estudiar dentro de este sistema, nada me llamaba la atención, no quería pasar 4 años de mi vida estudiando algo que no me gustaba y pasar el resto de mi vida trabajando en ello. He trabajado por cuenta ajena y por cuenta propia en grandes y medianas empresas y me he dado cuenta de cómo funciona el sistema.
Nos han educado para ser buenos trabajadores, para hacer caso en casa, a las leyes, a tu jefe. Solo los adinerados o de buena familia podían ser emprendedores, crear grandes empresas con muchos trabajadores, si tú eras autónomo eras un pobrecito que ganaba lo que podía. Tu función no era hacer empresas si no trabajar en ellas.

En este país hay una falsa moral al respecto, si cierras un negocio te ven como un fracasado, en Estados Unidos cuentan tu fracaso como experiencia, no volverás a cometer los mismos errores porque has aprendido.

Fomentamos que juventud sea emprendedora a que tenga su empresa, que estudie económicas y empresariales y jamás le faltara el dinero ni el trabajo, ¿pero esto es así realmente? No sabéis la cantidad de gente que me ha dicho “me apunto a ADE que eso siempre tiene salida”, y esto ¿ es verdad?

Tengo claro que mi trabajo será por cuenta propia, quiero hacer algo que me guste, quiero levantarme por la mañana e ilusionarme por trabajar, quiero ser feliz todos los días, no solo los fines de semana, quiero viajar y si me equivoco una y otra vez no me sentiré fracasada porque sabré por donde debo ir.
No vivimos para trabajar, trabajamos para conseguir dinero a cambio y así poder vivir. Cosa sencilla en su esencia pero se nos ha olvidado.